Mi princesa de arena se llama marina mora

Apenas basta una pequeña foto para darse cuenta que marina mora es bellísima. Antes era solo un cuerpo incandescente. Repleto de deseo y pendejada. Luego fue una mujer exitosa. Elegida entre las más bellas del planeta. Y luego empezó a engordar. Se hizo la gorda bella. Pero bellísima aún. Su rostro casi altivo. Su color bronceado que combina con la arena. Puedo verla tomando sol. Ha ido sola a la playa. Y se está echando boca abajo. Luego de quince minutos cambia de posición y está boca arriba. Mira sus pechos. Algo de silicona tienen. Pero debemos respetar su magnitud y saborearlos hasta el amanecer. Ahora marina promociona su escuela de modelos. Se ha tomado una foto de perfecto perfil. Tetas de melón y que saben a melón. Llevas un vestido elegante. No puedo dejar de ver tu escote. Déjame recostarme un ratito ahí un ratito.

Mi princesa de arena se llama danuska zapata

Es un culo de vedette. Un culo que aparece en los periódicos baratos. Es un culo gordo. Rico para apretar. Es la chica más rica del barrio. La cada vez más popular danuska zapata siempre ha destacado por tener un trasero hermoso. Y completamente natural. Es que algunas chicas nacen culonas y otras sin culo. Son esos días cuando uno ve la perfecta redondez en los jeans apretados de una mujer guapa. Cuando pasa al lado de un niño o un vejete y no podemos evitar voltear para ver ese trasero. Mamacita. Provocas un único deseo. La fantasía perfecta es perderse en ese culo desnudo. Danuska está sobre una cama esperando ser penetrado por un pene. El hilo dental la ha arrechado primero y a ella le gusta comprarse esos calzones porque se introducen cada vez más en su sexo. Ella también quiere tocarse. Esas dos líneas bien marcadas en los glúteos uno las quiere seguir hasta los muslos. Un lugar donde todo es cálido y reconfortante. El falo del amante empieza a rozar ese trasero.

Cenando con adriana

Has aceptado salir conmigo. Y cuando he llegado a tu casa te he dicho que eres tan hermosa. Me dices que eso ya lo sabes y no necesitas que te lo repitan a cada momento. Eso te molesta. También me dices que te espere un rato mientras terminas de maquillarte. Pero si te ves perfecta. No aún me falta respondas. Luego de un rato me dices que pase a tu habitación. Ahora ya estás completamente lista. El vestido negro. Las pulseras. Los zapatos negros. Te ves hermosa o más hermosa que siempre. Te ríes porque ahora sí te gusta escuchar eso. Antes mentías. Quiero que en el restaurante todos vean que estás a mi lado. Y luego te llevaré de vuelta a tu casa y no saldré de ahí hasta poseerte por completo y quedarme saciado. Apenas me digas para entrar voy a saltar sobre ti y subirte la falda. Te quiero coger así con ropa. Manchar tu vestido. Te has demorado tanto en maquillarte y demoraré muy poco en dejarte sucia de sexo y más sexo.

Leyendo el cuerpo de adriana

Esta lencería me gusta mucho más. Aquí me dejas ver más adriana. Y tú tienes unos lentes en las manos. Estoy seguro que no lees nada interesante. Solo te gusta ver las fotos de machotes sin polo. O con los culos desnudos. Te gustan los hombres que te tiran a la cama y te ponen de espaldas. Te gusta que te tapen la boca cuando sienten que gimes mucho. Te gusta que respiren sobre tu nuca. Y que apoyen su frente sudorosa sobre tu cabello. Te gusta sentir la fuerza de un hombre dentro de ti. Tu amante te ha regalado una cajita. Te ha sorprendido ver que es lencería sexy. Quieres ponértela de inmediato y hacerle luego un striptease. Sabes que a tu amante le gusta verte cuando haces que tus manos desciendan a tu sexo. Y empiezas a rascarte con deseo. De tu boca empiezan a salir palabras sucias. Quieres cachar cachar y cachar.

Mi princesa de arena se llama adriana lima

Dicen que brasil es una sociedad que se mueve alrededor del sexo. Qué rico debe ser estar por alla y cogerse a las chicas que a uno le vengan en gana. Y hay variedad de bellezas. Sino miren a adriana lima. Una conocida modelo de pasarela. De la alta sociedad del mundo de la moda. Y su cuerpo es perfecto para modelar. Flaquita. Casi una muñeca. Y sería un buen regalo el tenerla envuelta en un paquete y luego quitarle todito lo que tenga. En esta revista de lenceria de victoria’s secret hay varias fotos de adriana. En todas se te ve muy bien adriana. No solo es bello tu cuerpo sino también tu cara. Pareces una perfecta malcriada. Tus ojos son tan verdecitos. Y tu cabello abultado dice que te gusta ir a las peluquerías y que otras mujeres toquen tu cuerpo y te den masajitos. A través de ese corpiño apenas puedo ver parte de tus senos chiquitos. Más abajo no enseñan muchos. Tal vez tienes ese abanico porque ahora sientes mucho calor. Y el amante se está acercando para llevarte a las sabanas de seda y besarte lentito entre las piernas.

La espalda de claudia

Me encanta tu pelo largo. No me importa mucho el color. El tuyo se limpio y su olor debe ser de perfume caro. En tu cabello paso mis dedos y no puedo aburrirme. Y luego voy buscando tu oreja y quiero acariciarla y no aburrirme. Primero con los dedos y luego con mi boca. Me gustaría quitarte la blusa. Descubrir cada puntito de tu espalda. Apartar un poco tu pelo y besarte la nuca. Besarla así pase un montón de minutos. Ya luego abrazarte los senos. Me gusta sentir tu vientre. Apretarme contra tu espalda. Debajo de esa falda mi mano poco a poco se va acercando. No puedes esconderme nada. Voy a ver tu rostro en el espejo y lo único que me dices es que no me detenga. Te gusta lo que te estoy haciendo ahorita. Te gusta mucho.

Mi princesa de arena se llama claudia ortiz de zevallos

Vi estas fotos hace años en una revista sabatina. Inmediatamente empecé a buscar información sobre esta chica. Claudia ortiz de zevallos. Pero no había muchas fotos. El artículo decía que claudia es una chica arequipeña que iba a concursar para ser miss perú. Los jueces debieran haberle dado la corona al instante. Su primera impresión mata. Esa cara tan finita. La punta de la nariz alargadita. Su perfecto rostro. La raya al medio del cabello la hace ver tan natural. Todo es natural en ello espero. Esas tetas deben ser naturales. Cuelgan y piden que las atrapes y no dejes de manosearlas. Me gustan también sus uñas bien cuidadas. Y esos aires de chica difícil de complacer. La foto la han tomado en el baño al parecer. Solo le falta quitarse esa diminuta falda para sentir el jabón sobre su cuerpo. Y el chorro de agua caliente besando sus hombros su espalda y sus pechos.